Cepillo citológico

La citología es una rama importante en nuestros días, ya que analiza material celular conformado por conglomerados celulares o células individuales que se obtienen mediante métodos bastante sencillos, haciendo que sea muy útil, fácil de aplicar y accesible para la población en general. Entre los métodos, destaca el raspado que se realiza con un cepillo citológico, que tiene que estar en óptimas condiciones funcionales y estéticas para obtener lecturas precisas y confiables.

 

Los métodos de la citología

 

Para realizar diagnósticos certeros de algunas patologías, se requiere una biopsia, lo que no es muy conveniente en muchos casos, debido a que se requieren herramientas quirúrgicas complejas o a causa de que las lesiones son muy profundas e inaccesibles. En otros casos, ocurre porque las condiciones del paciente no posibilitan la toma de muestras.

 

Afortunadamente, la citología ha reducido esa complejidad mediante un método conocido como biopsia de aspiración con aguja fina (BAAF). Esta se aplica, por ejemplo, en patologías del cerebro. Lo primero es ubicar la posición de la lesión mediante imágenes y es posible llegar a zonas muy profundas e imposibles de acceder con otras técnicas. El procedimiento se efectúa sin lesiones en el tejido sano y de manera sencilla, lo que no ocurre con las biopsias, donde hay altos riesgos de que queden secuelas.

 

Esta técnica permite obtener especímenes para su estudio y permite su aplicación en muchas áreas del cuerpo, por ejemplo, en ganglios linfáticos, glándulas mamarias, tiroides, tejidos del abdomen, entre otras. Igual permite muchos análisis de inmunohistoquímica para diferentes procedimientos, como la hibridación en sitio.

 

Hay otra técnica en análisis citológicos que, mediante el raspado, permite el análisis de especímenes de secreciones corporales, por ejemplo, la mucosidad pulmonar y del cuello uterino, fluidos de los bronquios, orina, entre otros. Esta recibe el nombre de citología exfoliativa y destaca por el uso de un cepillo citológico para incidir en las células descamadas en zonas superficiales del cuerpo, de modo que se detecte la ausencia o presencias de patologías neoplásicas y realicen los respectivos estudios y tratamientos.

 

Este procedimiento es igual usado para recuento de células en diferentes fluidos del cuerpo y es una excelente herramienta para la salud femenina, ya que permite investigar la acción de las hormonas en el endometrio y las células vaginales. Hay varios tipos de citología exfoliativa, no obstante, las más conocidas son:

• Citología endometrial y cervicovaginal.
• Citología del tracto digestivo y la boca.
• Citología del sistema respiratorio (en la que se incluyen esputo y cepillados en los bronquios).
• Citología de la orina.
• Citología de derrames cavitarios (cómo articular, pleural, pericárdico y ascítico).
• Citología del líquido cefalorraquídeo.

Para procesar las muestras obtenidas mediante el raspado o cepillado, se ha posicionado actualmente la técnica en fase líquida, que consiste en la mejora y concentración para análisis bajo microscopio de las muestras remitidas a laboratorio tras la suspensión de las células exfoliadas en una sustancia con potencial de fijación.

 

La citología mediante raspado y cepillado es bastante versátil y menos dolorosa que la aspiración con aguja fina. Igualmente, brinda imágenes de mejor calidad y no se requieren aparatos complejos, solo algunos de diseño sencillo, pero tienen que diseñarse con calidad médica para evitar problemas en las lecturas, como el cepillo citológico. Tales ventajas han hecho que sea la más utilizada, a lo que se suma la estandarización de preparaciones para mejores resultados y su análisis posterior mediante computadoras.

 

Es importante mencionar la importancia de este método para la salud pública, principalmente para las mujeres, ya que facilita los análisis de Papanicolau y cuello uterino. En los países de mayor desarrollo, su aplicación ha disminuido considerablemente la mortalidad causada por el carcinoma cervical, en los que los programas enfocados en la detección de dicha neoplasia usaron adecuadamente la técnica en el cuello uterino.

 

Es altamente efectiva, lo que se ha mostrado desde su surgimiento, ya que, hasta nuestros días, no hay otros ensayos con el mismo éxito en la reducción de los índices de mortalidad a causa de cáncer en cuello uterino, no obstante, es importante mencionar que la citología exfoliativa en estos casos es efectiva solo en la prevención del cáncer cervical escamoso, especialmente en mujeres que están en edad de reproducirse.

 

Tal efectividad y otros beneficios han hecho que este procedimiento se use aún ampliamente. México es un claro ejemplo de ello, donde el cáncer cervical es un problema serio para la salud pública. Es importante mencionar que, si bien es de mucha ayuda, la certeza que ofrece este método como arma preventiva secundaria en estudios de cuello uterino presenta algunas limitaciones. Estas deben conocerse, como un muestreo adecuado, una buena interpretación por parte de los especialistas, tratamientos y seguimientos correctos en los casos donde la citología se mostró anómala.

 

El cepillo citológico

 

Como mencionamos, la citología exfoliativa requiere del rascado o cepillado de ciertas zonas para la obtención de las muestras. Para ello, es necesaria la utilización de un cepillo citológico. Este dispositivo de uso médico recolecta con un alto porcentaje de efectividad las células del canal endocervical u otras zonas, siendo una herramienta crítica pese a su diseño sencillo.

 

Se fabrican con fibras de plástico, que se distribuyen en varias formas, principalmente en forma de espiral y se unen con firmeza a una base de alambre para que no se desprendan durante su utilización. Al utilizarse con material biológico que puede ser peligroso, son desechables y deben tratarse adecuadamente según las normas de residuos biológicos aplicables al sector médico.

 

Se ofrecen en versiones esterilizadas y no esterilizadas y el material más común es el nylon 100% virgen, de modo que no haya decoloraciones y se garantice la inocuidad requerida en cualquier procedimiento médico.

 

Otras características son su mango ABS aristado y el alambre de acero inoxidable de grado quirúrgico. Igual hay ejemplares con tijera incluida y se ofrece en empaques herméticamente sellados. El cepillo es suave al tacto y de color blanco y usualmente se ofrece con acabado redondeado en la punta.

 

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