Las jeringas y agujas son productos sanitarios de primer orden. Estos materiales están conformados por una fina aguja hueca en su interior y un respectivo conector que generalmente se ajusta a una jeringa. Son indispensables para administrar medicamentos, líquidos y otros tipos de sustancias necesarias para el organismo o, en dado caso, para la extracción de sangre requerida para estudios especializados.
En este sentido, las agujas de tipo hipodérmicas son usadas para ser insertadas debajo de la piel y, de su tamaño, depende hasta dónde será la profundidad en el tejido. A continuación, explicaremos más detalles sobre estos materiales tan esenciales para la aplicación de tratamientos y métodos médicos.
¿Cómo es una aguja hipodérmica?
Se trata de un material metálico en forma de tubo con pequeño diámetro y una longitud que puede variar de acuerdo al objetivo para el cual se va a utilizar. Este instrumento tiene un extremo cortado a bisel, afilado y puntiagudo que se utiliza para ser insertado en la piel. De igual manera, dispone de un casquillo que encaja adecuadamente en la jeringa que previamente ha sido esterilizada.
Este producto se destaca principalmente por extraer o inyectar sustancias determinadas en el cuerpo a través de la piel y, es altamente recomendado que sea manipulado siempre con un envase de manera individual y estéril.
¿Cuáles son las partes de una aguja hipodérmica?
Estas son las partes que conforman a una aguja hipodérmica:
- Tubo metálico. Comúnmente se conoce como la aguja. Se encuentra fabricado con acero inoxidable y una capa elaborada en material de silicona que permite la facilidad para ser insertada en la piel.
- Casquillo de inserción. También se le conoce como cubo o pabellón. Generalmente, es fabricado con polipropileno traslúcido con un color determinado conforme al calibre o diámetro de la respectiva aguja.
- Pieza protectora. Esta dispone de una forma más o menos cilíndrica. Sirve para proporcionar la protección de la aguja, logrando adaptarse en el área superior con el casquillo de inserción con la jeringa. Es una zona que impide posibles daños en la aguja o el bisel.
- Corte oblicuo en el borde. Se trata del bisel, la punta de la aguja que debe contar con un filo que asegure una correcta inserción. En este sentido, los biseles cortos con mayor ángulo se usan preferiblemente para una punción de los vasos, mientras que, los biseles largos con menor ángulo se utilizan para profundizar debidamente en los tejidos.
Esta aguja se clasifica conforme al tamaño del cono, el tipo de bisel y las dimensiones del respectivo tubo de la aguja, es decir, en cuanto al calibre y la longitud.
Es de saberse que, la escala usada internacionalmente para denotar el calibre son los “Gauges” o G, debido a la longitud que se expresa en pulgadas. Al respecto, cuando existe menor calibre de la aguja, entonces el número de “Gauges” o G será mayor.
Uso de las jeringas y agujas
Las agujas y jeringas son productos con amplia variedad de usos médicos y de laboratorio como son:
- Las inyecciones de insulina son usadas para la administración de insulina en pacientes que padecen diabetes.
- Las agujas y jeringas son instrumentos médicos ideales para la administración de diversos medicamentos por vía subcutánea, intravenosa o intramuscular.
- Son usados para extraer muestras de sangre que permiten la realización de estudios médicos precisos.
- También se usan para administrar vacunas.
¿Cómo elegir la aguja hipodérmica adecuada?
Para seleccionar un material de óptima calidad para el uso en centros hospitalarios o industrias farmacéuticas, es recomendable conocer las características básicas de este tipo de aguja. Igualmente, es conveniente identificar el uso y su correcta aplicación.
Es importante tener presente que, que al igual que otros materiales como en el caso de la aguja whitacre, las demás jeringas y agujas, cuando llega el momento de deshacerse de estos productos después de usarlos se deben considerar algunos consejos como:
- Al usar las agujas no es recomendable doblarlas o romper la jeringa de manera manual.
- De ser posible usar un destructor de aguja y jeringa, tomando en consideración las medidas de higiene y seguridad correspondientes.
- Desechar estos materiales en un respectivo contenedor médico inmediatamente luego de ser usados.
- El contenedor a utilizar debe ser rígido y de preferencia debe indicar la naturaleza de los respectivos residuos contenidos.
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